
TAROT TERAPÉUTICO
Una interpretación arquetípica desde la visión de Carl G. Jung.
Desde tiempos antiguos, el tarot era utilizado como un medio de adivinación mediante el cual, las brujas y brujos antiguos eran capaces de predecir eventos particulares y colectivos que podían llegar a suceder.
Dicha herramienta era considerada como un arte oculto, ya que por entonces si eran encontrados practicando este arte podían recibir grandes represalias. Por ello, no era de fácil acceso y cada clan tenia sus especialistas encargados de emplear esta herramienta, como así también formar generaciones futuras.
El tarot fue considerado desde entonces dentro de lo que se denomina ocultismo, donde en la actualidad sigue siendo empleado como medio de adivinación principalmente.

Actualmente, el tarot tiene otros usos y se utiliza también a nivel terapéutico. Existe una corriente que se suele denominar Tarot Terapéutico o Evolutivo, que trabaja aspectos personales y psicológicos de la persona. También se denomina Tarot Psicológico o Transpersonal.
Muchos terapeutas suelen utilizar la denominada tirada del tarot de la salud, donde se saca un arcano mayor y esté nos da pautas de cómo trabajar nuestro estado de salud, sobre todo a nivel interno o emocional.
Otra tirada que se suele hacer para trabajar a nivel interno es la denominada tirada del tarot sí o no, que consiste en realizar sencillas preguntas donde sólo cabe un sí o no como respuesta. Esta tirada sencilla de hacer, recoge una gran fuerza a la hora de trabajar nuestro crecimiento personal.
Tanto la tirada de la salud como la del si o no llevan implícito un gran trabajo personal para el consultante. Muchas veces la persona que recibe una respuesta del tarot puede no estar de acuerdo con ella, incluso incomodarle la respuesta que se le da, en este caso sin duda, el consultante tiene una gran oportunidad para crecer.
Suele ser habitual que muchas personas repitan las consultas del tarot esperando la respuesta deseada, pero muchas veces ésta no llega y las cartas lo que nos quieren indicar es que nuestro destino depende de los cambios que estemos dispuestos a realizar.

¿Qué es el tarot terapéutico?
El Tarot Terapéutico tiene como misión trabajar aspectos emocionales de las personas que potenciadas pueden aportar al crecimiento personal, es decir, desbloquear determinadas energías que no nos permiten prosperar.
Además de realizar un proceso de limpieza emocional en la persona, este tipo de tarot nos ayuda a conocer nuestras grandes habilidades y sacarlas a luz.
Esta disciplina tiene como principios generales el tomar consciencia que somos seres creadores, que atraemos a nuestras vidas todo aquello que llegue para hacernos crecer y evolucionar, no siempre lo que pensamos o creemos. Expandimos nuestra consciencia y vemos que somos producto de nuestras decisiones, no de las circunstancias que vamos atravesando y por ello, identificamos y soltamos estructuras y esas resistencias que nos limitan a la hora de vibrar nuestras potencialidades.
La escuela tradicional del tarot considera que el futuro en gran medida ya está escrito, y que en cierta manera no podemos escapar de nuestro destino.
La gestión de nuestras emociones y la determinación pesa más que los patrones y mandatos que podamos traer al nacer. Hoy en día, los terapeutas profesionales aplican esta máxima del tarot terapéutico: “La última palabra sobre nuestro futuro la tenemos nosotros mismos”.
Si el tarot quiere ser respetado y considerado como una disciplina seria, sin duda debe seguir profundizando en todo lo que tiene que ver con el tarot terapéutico.
¿Por qué es terapéutico y no adivinatorio?
La visión adivinatoria y la terapéutica se diferencian en cuatro cuestiones fundamentales:
1ª El individuo y sus circunstancias. El Tarot Adivinatorio pretende conocer hechos, el Tarot Terapéutico comprender los hechos que ya conocemos. El centro de la cuestión no está en los hechos y las circunstancias sino en el individuo que las vive.
2ª La cuestión del destino. Para quienes practican futurología, el destino gobierna nuestras vidas sin posibilidad de crear el camino que sentimos: “Si naciste para martillo, del cielo te caen los clavos” y el Tarot acaba siendo un intermediario entre ese destino y los simples mortales. Así, somos reducidos a espectadores de nuestras propias vidas.
Para el Tarot Terapéutico somos los “cocineros” de nuestro destino, continuamente lo estamos creando a partir de nuestras decisiones, acciones y omisiones y en cualquier momento tenemos la posibilidad de cambiarlo, de crearlo. Nuestra capacidad de crear nuestro futuro es proporcional a nuestra conciencia. El Tarot Terapéutico es una herramienta que nos ayuda a tomar conciencia de lo que realmente está dificultando nuestra realización y muestra qué caminos podemos tomar si queremos evolucionar.
3. La cuestión de la responsabilidad. Para el Tarot adivinatorio el ser humano ¿Qué libertad puede tener si su vida está atada al destino, hasta el punto de poder conocer su futuro? Libertad y responsabilidad caminan juntas. Si insistimos en mostrar a nuestros consultantes que sus vidas son el producto de extrañas, ajenas e imprevisibles fuerzas como el azar, destino o trabajos de magia estamos minimizando a los seres humanos como seres creadores.
Según la visión terapéutica somos totalmente responsables por la vida que llevamos. Parar de colocar la responsabilidad (o la culpa) de nuestra situación en los demás, en la pareja, los padres, el jefe, el gobierno, el destino... es el primer paso para cambiar. “La felicidad y la fortuna son cuestiones de elección y no de suerte”. Osho.
4. La cuestión del bien y del mal. El bien y el mal no son verdades absolutas. Lo que es bueno para una persona hoy, puede no serlo mañana. Lo que es bueno para mí, puede no serlo para usted. No existen enfermedades y si enfermos. El Tarot Terapéutico no trabaja con el bien y el mal, sin embargo considera que existe un aspecto nuestro, particularmente íntimo que no fue alcanzado por las manipulaciones y la programación familiar y social, donde reposa la esencia del ser humano.